REVISTA ESPAÑOLA DE

Vol. 36, n.º 2, 200
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ARTÍCULO
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Despedida como Presidenta

Ana Puras

   

En esta fecha en que dejo la Junta Directiva, quiero despedirme de todos vosotros con reconocimiento y afecto.

A todos, gracias. Me he entregado a este quehacer, pero me he sentido acompañada y apoyada y espero, gracias a ello, haber cumplido mínimamente los Objetivos previstos de mejora de nuestra Sociedad. Haber servido a la SEAP, en definitiva. Desde que Alfredo Matilla me confió la Encuesta a los Servicios de Anatomía Patológica, previa al XVIII Congreso y base del Libro Blanco de la Patología, hasta que terminó el XX Congreso y dejé la presidencia ejecutiva, mi compromiso con la SEAP ha sido un constante reto, ocupando una gran parte de mi actividad diaria.

A través de los Boletines, y a veces de forma demasiado profusa en mi afán informativo, habéis tenido oportunidad de seguir la trayectoria de todas las acciones emprendidas en los diferentes ámbitos: representatividad en el hospital, Universidad, docencia, Hospitales Comarcales, Grupos de Trabajo, forenses, empleo, actividad privada, etc.; en fin, de toda la problemática; espero no haberos defraudado y haber sabido aprovechar todas las oportunidades para transmitir nuestro mensaje acerca del significado y trascendencia de la disciplina, en los foros científicos y sociales, en los que he tenido posibilidad de hacerlo y en los medios de comunicación.

He tenido la suerte de contar con la ayuda de compañeros excelentes, mentes privilegiadas, trabajadores entusiastas que, sin presunción, han colaborado e impulsado los Grupos de Trabajo, los Foros docentes, la relación con las instituciones, nacionales e internacionales, …; pero ya sabéis que el período no ha estado exento de dificultades; debe tenerse en cuenta que, en pocos años, el Ministerio de Sanidad ha tenido tres titulares diferentes, con todos los cambios de personal de alto rango administrativo que ello ha conllevado, provocando un enlentecimiento considerable de toda la mecánica burocrática, por sí misma complicada. También con Justicia y Educación, Ministerios a los que en su momento nos dirigimos, tuvimos problemas similares.

Me voy a permitir, a modo de epílogo, hacer una relación de las actuaciones que recuerdo como más relevantes, en relación con los Objetivos que me propuse cuando presenté mi candidatura:

1. Se han potenciado las Reuniones Territoriales, apoyando a los Presidentes, iniciando la dinámica de Reuniones Administrativas, de comunicación y debate, en medio de la parte científica de estos encuentros, con levantamiento de Actas; también se ha iniciado el proveer a cada Presidente de una Credencial válida ante las autoridades sanitarias. Que se sientan nuestros Presidentes apoyados y que, como contrapartida, sean los vehículos de transmisión de información desde y hacia la Directiva.

2. Se han creado y llenado de contenido los diferentes Grupos de Trabajo que han aglutinado la problemática planteada por los miembros de la SEAP, respondiendo a sus consultas y se han plasmado las conclusiones y muchas respuestas en el 1er Suplemento del Libro Blanco de la Patología.

3. Nuestra Revista ha sido remodelada en profundidad, tras el cambio de Dirección, con considerable dedicación y esfuerzo, casi permanente, de los actuales responsables, y con mejoras tales como el cambio de Sede, que ha pasado a ser la de la SEAP, la indexación de todos sus contenidos desde 1968, la disponibilidad en «PDF» de varios años y, por último, la fundación de una edición virtual, completamente nueva, simultánea y completa, en Internet desde el número 35-1 de 2002.

4. También se logrado la informatización de la Secretaría de la SEAP, gracias al apoyo desinteresado y continuo de personas por todos conocidas. Todo esto, ya lo podéis suponer, no ha estado exento a veces de considerables dificultades.

5. Una constante durante todo el período, ha sido la de tener buenas relaciones con los medios de comunicación, y pedir su ayuda para dar a conocer nuestra especialidad, empezando con una entrevista en el programa Hoy por Hoy de la SER, con Iñaki Gabilondo, así como la convocatoria y atención constante a todos los medios en las Reuniones Nacionales en el Colegio de Médicos, o cuantas veces ellos lo han solicitado, afrontando sus entrevistas en los foros en que hemos participado a nivel institucional, a veces problemáticos.

6. Hemos visitado a la Ministra de Sanidad y expuesto nuestros problemas, y hemos escrito cartas hasta a cuatro Ministros: dos de Sanidad, uno de Justicia y uno de Educación; nos hemos reunido con responsables de estos Ministerios y participado hasta en tres diferentes Comisiones del Insalud, y conseguido algunos frutos que ya fueron referidos en las correspondientes Actas de Asamblea publicadas en los Boletines.

7. Hemos consultado con los asesores jurídicos del Insalud cuantas preguntas se nos han planteado en ese ámbito, habiendo sido generosamente correspondidos.

8. Hemos escrito cartas a los responsables sanitarios de las Comunidades Autónomas y a los Directores de los hospitales, hemos arbitrado normas para los Servicios, las Salas de Autopsias, etc., con la ayuda valiosísima de muchos patólogos, y de los Clubes. La Cartera de Servicios es una realidad que llenamos de contenido, aunque nos tememos que pueda ser utilizada de una manera contraria a los principios que la propiciaron.

9. Se ha creado un foro de estudio de la problemática forense, aunque estamos lejos, a pesar de nuestras múltiples Reuniones en Madrid, Zaragoza y Bilbao, de conseguir el reconocimiento de la titulación del patólogo para acceder a la carrera forense.

10. Hemos iniciado el cambio de denominación de la especialidad, y de la asignatura, y de la Sociedad; aunque tarde, ya que la palabra Patología se la han apropiado antes muchas especialidades y ello está dificultando ver el final, que creemos irrenunciable.

11. El Foro de Docencia Pre-Grado, en dos reuniones continuas de 48 horas cada una (en Murcia y Sevilla), consiguió aunar las voces de nuestros profesores de la asignatura, algo que deberá continuar, ya que es pieza fundamental en el desarrollo de nuestra disciplina.

12. Hemos insistido, por escrito, en la independencia de los Servicios de Patología, en que somos clínicos, en que no debe «externalizarse» nuestra disciplina, imprescindible para el funcionamiento del hospital.

13. Hemos atendido las denuncias acerca de la problemática que tienen muchos colegas en su actividad privada, aunque se haya conseguido poco; haría falta muchas veces una unanimidad de criterios entre los patólogos, algo que se ha visto difícil de conseguir, para que los frutos fueran mayores.

14. Se han creado dos nuevos Clubes y dos nuevos Grupos de Trabajo y se han impulsado especialmente algunos de los ya existentes y que lo han demandado, como el de Autopsias y su Registro Nacional.

15. Se han realizado cuatro encuestas sobre diferentes temas a los miembros de la SEAP. Pero, todo lo hecho, necesita del empuje continuado y la colaboración de todos; si no, todo o casi todo podría resultar insuficiente.

16. Se han actualizado los Estatutos y nos hemos ocupado de que nuestros Miembros de Honor, muchos de ellos residentes en el extranjero, se sientan partícipes de nuestra Sociedad y reciban puntualmente la Revista, los Boletines y cuanta información se genere.

17. El Congreso Nacional quisimos que fuera un foro de encuentro cordial, y de intercambio de ciencia, con una parte importante dedicada a las relaciones entre colegas, personalizando nosotros mismos, los organizadores, la atención; fue para nosotros una experiencia de trabajo colectivo, en equipo, que resultó muy gratificante, por la acogida humana y científica que tuvo; como recuerdo queda en la Sede de la SEAP el obsequio que la alcaldesa de Pamplona nos hizo, los Libros y Manuales que los compañeros generosamente aportaron, con gran esfuerzo, a petición de esta Presidenta, y la edición facsímil de una obra de Miguel Servet, que se encuentra en la Biblioteca Nacional, y que fue financiada por Instituciones Navarras; gran parte de ello reflejado en el magnífico vídeo que una Casa Comercial, ajena a nuestro quehacer, nos mostró en la Cena de Clausura y que estuvo en Internet, lo mismo que las principales Conferencias, que también se mostraron en la red, con foros de debate. A pesar de todo hubo beneficios económicos para la SEAP, y un reparto de los Seminarios excedentes entre los Hospitales Comarcales.

18. Hemos instituido dos Premios: el Santiago Ramón y Cajal de Patología y el Enrique Merino, a otorgar en cada Congreso Nacional.

19. Hemos hecho también un homenaje a Santiago Ramón y Cajal en Petilla, con placa conmemorativa incluida y nuestra Revista ha editado un magnífico Número en su honor, completamente neurológico y con firmas de primera categoría.

20. A las Casas Comerciales, que generosamente han contribuido a que con nuestros escasos medios se hayan llevado a cabo tantas actividades tuvimos la oportunidad de agradecerles su apoyo en una de la Reuniones Nacionales en el Colegio de Médicos, por medio de un Diploma; nos consta que para algunas es un esfuerzo de generosidad su ayuda a la SEAP.

21. No me he negado, durante todo mi período como Presidenta, a participar en ningún foro en el que he sido requerida como tal, desde la presentación de libros, con presencia física en el Acto, a la presentación escrita de todos los Libros o Manuales que durante este período se me han solicitado, o la participación en Mesas Redondas, no sólo científicas, sino también divulgativas, culturales o de problemática institucional; en fin, algo que me ha supuesto mucho esfuerzo llevar a cabo y de lo que siempre he dado cuenta a la Asamblea y publicado en nuestros Boletines.

22. He tenido mucho interés en que la mía fuera una presidencia dialogante, que quería y pedía participación en las tomas de decisión importantes y debo confesar que a mi llamada respondieron siempre los miembros de la SEAP. He escuchado, atendido y respondido, a todos los que de una u otra forma pidieron ayuda institucional, dando facilidades para ello.

23. Mi diálogo fue constante con muchos Presidentes de otras Sociedades Científicas afines y con los colegas iberoamericanos; y sobre todo, he intentado ser la voz de los que más difícil tenían el acceso a los Directores o núcleos de poder de las Instituciones sanitarias y no he escatimado esfuerzo para escribir Circulares a Directores o responsables sanitarios o hacer consultas legales a los conocedores de los temas, etc; a este respecto tenemos mucho que agradecer a gente anónima que ha respondido, sin solicitar honorarios, y a los que no hemos dado otra compensación que ese agradecimiento.

Como habéis visto, y ya sabíais, hemos tratado diversos y complejos temas de no fácil solución, pero el esfuerzo ha merecido la pena; han quedado cosas en el camino, sin ver el fruto final por lo anteriormente expuesto, que espero y deseo se vayan resolviendo por los que hace dos años ya tomaron el testigo y los que les seguirán a partir de este momento. Sed exigentes como lo fuisteis conmigo, pero también estimulad y ayudad, como hicisteis conmigo, a los que ocupan los puestos de responsabilidad y de representación vuestra.

Aunque este período en la ejecutiva de la SEAP haya terminado para mí, no por ello dejaré de interesarme e ilusionarme, ni de apoyar a las nuevas generaciones, en las que se asienta nuestro presente y nuestro futuro; estad seguros de que siempre contareis con mi disponibilidad, aunque sea a título personal.

Han valido la pena estos años, en los que me he volcado en la medida de mis fuerzas y dedicado mi esfuerzo diario de modo preferente al servicio de los intereses colectivos; pero, repito, sin vuestra colaboración y sin el gran apoyo de mi Servicio y de mi Hospital, Virgen del Camino, nada hubiera podido hacerse; os animo por ello a continuar en el camino abierto, a apoyar a nuestra Sociedad y a nuestra Revista, y a colaborar con sus responsables.

De nuevo, gracias. Hasta siempre.